“Lo de ligar es algo sencillo, solo tienes que ser tu, salir sencillamente a divertirte, y cuando encuentres a esa chica especial, que sabes que es la chica para ti, todo será de forma natural. No importa tu nivel de destreza, no importa lo que digas o hagas, porque si tu eres realmente una buena persona, ella se dará cuenta en seguida y te deseará fervientemente por ello, y todo será maravilloso, descubrirás una nueva parte de ti, y ahora estarás completo.”
Muy bien, tenemos esta premisa. Ahora cogemos a un chico estupendo, genial, de esas personas que vale la pena conocer al menos una vez en la vida. PERO, cuya habilidad natural para eso de seducir es nula. Este chico, va a X lugar y se encuentra con una chica estupenda, maravillosa, encantadora, una preciosidad por dentro y por fuera. El chico está aterrado, y no sabemos cómo (quizá se hayan alineado los planetas), ha reunido el valor suficiente como para acercarse a decir algo. Sin embargo, cuando va a hablar con ella, descubre que no sabe cómo hacerlo, a pesar de su riqueza interior, se ve incapaz de generar una conversación interesante, es incapaz de generar un deseo auténtico en la otra persona.
Y no me digáis por favor, que esta situación nunca se da, porque es algo que está a la orden del día.
Y este es un apunte importante, que aunque parezca obvio, parece que aquí algunos no terminan de entenderlo: las chicas no tienen telepatía (ni los chicos tampoco), no pueden saber con solo una mirada o con una frase, cómo es una persona. Al igual que el resto de mortales, ellas son seres humanos normales y corrientes, y como tales, solo pueden trabajar con la información que se les transmite.
El resultado es que nuestro “galán”, no se come nada, es un auténtico y absoluto desastre con las chicas. A su alrededor, ve como otros consiguen con facilidad lo que él no puede.
¿Qué está pasando?
Bueno, según la premisa de la que hemos partido, la seducción parte de forma natural para todo el mundo, y si sencillamente eres buena persona ligarás muy fácilmente. Por lo tanto, si nuestro protagonista no es capaz de ligar, y sin embargo eso es algo que se hace de forma natural, lo que nos queda es que las chicas saben cómo es él, realmente lo han conocido.
Cuando le ha entrado a todas las chicas, todas se han dado cuenta de cómo es, tienen auténtica, completa y veraz información sobre él; Y sin embargo, lo han rechazado.
Por lo tanto, todas esas chicas, que recordemos que saben como es, consideran que a pesar de ser alguien maravilloso, no es digno en absoluto de estar con ellas. Y los demás chicos, si que ligan porque ellas los han conocido y son mucho mejores personas que nuestro “galán”, son mejores seres humanos, y por tanto sí que son merecedores de estar con ellas.
Y aunque luego algunos de esos chicos se comporten como cerdos con ellas, y las traten fatal, estos tíos siguen siendo mejores personas que nuestro protagonista, porque ellas así lo han visto claramente.
Por lo tanto, tenemos que nuestro “galán” es una mala persona en comparación con el resto de chicos, que no se merece estar con ninguna de las chicas que ha conocido, según ellas. Por lo tanto, tenemos que ellas son las únicas culpables del rechazo, ellas lo consideran inferior, indigno. Y nuestro maravilloso chico, no se merece en absoluto estar completo, encontrar esa parte de él que le falta, y que sólo encontrará si está con una chica, y por lo tanto, siempre estará medio vacío por dentro.
¡¡Un momento!! ¿Esta realidad que nos indica la premisa, no tiene la consecuencia de que nuestro galán odie a las mujeres? A fin y al cabo, lo desprecian e infravaloran por cómo es él en realidad, y por culpa de ellas nunca estará completo del todo y no será jamás totalmente feliz.
¡¡Oh!! ¡¡Sorpresa!! Nuestra premisa maravillosa y edulcorada tiene como consecuencia el culpar a las mujeres de que ciertos hombres, por muy buena gente que sean, no liguen. Y también tiene como consecuencia que los hombres odien a las mujeres, por no permitirles ser totalmente felices. Vaya!! Pues según este análisis, nuestra premisa maravillosa es machista y genera un odio y acusación injusta hacia las mujeres!
¿No era precisamente todo lo contrario?, es decir, ¿No se suponía que era lo que se propone y discute en este hilo, lo que genera a tipos egocéntricos, machistas, etc..? Pues vaya, parece que la premisa edulcorada lo hace!!
Vamos a partir ahora de una premisa que se supone defiende este hilo, y a analizarla racionalmente, al igual que hemos hecho con la anterior, con el mismo caso de nuestro “galán”:
“No todos los chicos tienen la misma habilidad natural con el sexo opuesto, no todos saben de forma natural cómo comportarse con las chicas. Esto no tiene nada que ver con cómo sean por dentro. A priori no hay nada malo en ellos. Sencillamente cometen errores variados a la hora de entablar relación con una chica, y por tanto esto impide que la información que ellos les transmiten a ellas, haga que ellas deseen auténticamente conocer a esa persona.
Además, hay muchas otras cosas en la vida además de la seducción y/o el amor, y una persona puede ser feliz consigo misma sin una absoluta necesidad de que otra esté a su lado. Además, solo cuando se es auténticamente feliz consigo mismo, cuando uno se ama a sí mismo sin necesidad imperativa de otra persona, se puede hacer feliz a alguien que esté a tu lado.”
Volvemos a repetir el dato obvio de que las chicas son seres humanos normales y corrientes que no tienen capacidades extrasensoriales como para conocer verdaderamente a alguien con poca o ninguna información.
Al igual que en el caso anterior, nuestro protagonista es una persona maravillosa con una gran riqueza interior. Y también al igual que en el caso anterior, nuestro “galán”, se ve incapaz de generar que el sexo opuesto tenga atracción hacia él. A su alrededor ve a otros chicos que lo consiguen de forma natural y sencilla, pero él no, él es incapaz de conseguirlo. Él es una persona maravillosa, y sin embargo las chicas lo han rechazado.
Según nuestra premisa, a priori no hay nada malo en nuestro “galán”, y la única razón de ese rechazo es que él no sabe de forma natural, cómo generar atracción en las chicas, para que éstas quieran conocerlo auténticamente y se den cuenta de lo maravilloso que es. Por lo tanto, no es en absoluto culpa de ellas el no darse cuenta de que nuestro protagonista es alguien genial que las podría hacer muy felices. Y la razón en general por la que otros chicos ligan, es porque sí que saben de forma natural cómo generar atracción hacia ellas, y que las chicas deseen conocerlos.
Puede ser que luego alguno de esos chicos se destape como un cerdo que las trata como objetos de usar y tirar. Pero el hecho de que estos tíos liguen más que nuestro “galán” tiene solo como razón que ellos saben de forma natural como hacer que las chicas quieran conocerlos. Por lo tanto, no tiene nada que ver en principio el cómo sea por dentro cada uno, y no tiene por qué ser en absoluto que esos tíos sean mejores personas que nuestro “galán”.
Por lo tanto, el protagonista de nuestra historia, solo tendrá que aprender a generar auténtica atracción hacia las chicas, para que la información que él les transmite haga que ellas le den la oportunidad de ser conocido, y que se den cuenta de lo maravilloso que es en realidad.
Además, según la premisa, nuestro “galán” puede ser totalmente feliz consigo mismo, amándose a sí mismo sin que sea un requisito indispensable estar con otra persona para ser enteramente feliz. Y también, al ser por sí mismo enteramente feliz, puede dar a la chica que elija (y que ella también lo elija a él, obviamente), una gran felicidad, un añadido maravilloso a sus ya completas vidas, y ser felices en un 150% (oh, qué bonito es todo! XDD)
Por lo tanto, tenemos que esta segunda premisa, que es la que se supone defiende en general este hilo, y que es tachada de machista, egocéntrica y demás argumentos despectivos; hace que nuestro “galán” encuentre solución a su problema, que entienda que no es en absoluto culpa de las chicas lo que le pasa, y que no hay nada malo en él.
¡¡Oh!! ¡¡Sorpresa!! Parece ser que esta premisa no solo no es machista ni egocéntrica, sino que es respetuosa con las chicas, con el resto de chicos, y con uno mismo!!
Y para terminar (por fin! XDD), tenemos como resultado final, que la primera premisa, la edulcorada y maravillosa, no solo es injusta con nuestro protagonista, sino también con las mujeres y con el resto de hombres. Y sin embargo, la segunda premisa, que se suponía la machista y egocéntrica, es la única de las dos que es auténticamente justa y esperanzadora con nuestro “galán”, que es respetuosa con las mujeres y con el resto de hombres.