#355
Te has puesto cachondón con el concepto paja y no has podido pararte a leer, hijo mío.
Quizá me he expresado mal. Yo estoy dirigiendo mi exposición a la herramienta, siempre refiriéndome a la herramienta (y con la conclusión de si lo que mide sirve o no para algo o es relevante). La inteligencia, la percepción, la comprensión o desarrollo de conceptos no es algo absoluto cuando queremos medirlos con una herramienta que influye en la medición. Y por eso esta herramienta tiene que estar adaptada al contexto donde va a utilizarse y a los sujetos del estudio.
Los test se adaptan para ser utilizados, te guste o no. Y la adaptación lleva en sí misma una manipulación, que es inherente a la acción de adaptar. Es por eso que la medición de estos test no es absoluta y si no están bien adaptados podríamos no estar midiendo correctamente.
Voy a hablar un poco de memoria, pero en las aulas TGD se utilizan algunas dinámicas para entrenar la percepción espacial, estas dinámicas o ejercicios son los mismos que se usan para medir.
Te pongo algunos ejemplos:
- Relacionar dibujos con siluetas.
- Unir puntos para formar un dibujo.
- Identificar derecha e izquierda.
- Ubicar figuras en espacios (juegos tipo tangram que serán los que más veáis en según qué test al igual que dinámicas con fichas de dominó)
En algunos de estos ejemplos, la adaptación de pruebas de este tipo a las características habituales de cada cultura, hace más clarificador el desempeño del niño. Si utilizásemos el mismo test tipo elaborado para un niño de Barcelona, que para un niño de el Congo, la comparativa entre ambos no sería procedente ya que el lugar del que parte en el desarrollo del test el primero, es ventajoso y no estaríamos midiendo realmente la percepción espacial del segundo. Esto sirve no únicamente para la prueba en sí sino para la forma de presentarla, dónde la desarrollamos, y cómo está enunciada.
Los test son complejos y la presentación de la herramienta, formato y características, pueden condicionar los resultados. Un test debe medir únicamente lo que dice medir y existe una necesidad de adaptarlos para que no estén midiendo de manera subrepticia o no intencionada otras cosas como, qué sé yo, la capacidad de atención. Esto sobre todo es fundamental para los niños cuando hay algunos sesgos que aún no están asumidos. Es decir: un adulto puede identificar de manera más sencilla un enunciado que contenga una negación y para un niño puede ser confuso.
Te pongo un ejemplo muy sencillo sobre esto último:
Los test de conducir. Están llenos de dobles negaciones, preguntas capciosas, preguntas en negativo y multitud de incongruencias que miden más la capacidad de atención y concentración para ese momento concreto en esa prueba particular, que los conocimientos. Y esto último sin duda es lo que deberían medir, en la mayoría de casos no lo hacen de manera veraz.
Esto corresponde a algo bastante razonable: las realidades educativas y por lo tanto de desarrollo cognitivo son muy diferentes en según qué zonas y hasta llegar a la especialización, estos test "neutros" tienen que estar adaptados para que Manguir de Guinea, Luis de Valencia, y Ranjid de la india, estén correctamente evaluados.
Y dicho esto, tal y como he comentado en #354 la relevancia de los test que miden el CI es... muy discutible en mi opinión (pero no por esto exactamente, sino por lo comentado en #354 al final).