El líder de la patronal CEL: «El trabajador debería pagar 45 días por año a la empresa que lo despide»
"Hay que ver con más naturalidad que los jóvenes tengan que irse de León o de España, yo lo hice", dice José Ángel Grego
El presidente del Círculo Empresarial Leonés, José Ángel Crego, afirmó anoche que considera ilógico que las empresas tengan que indemnizar a los trabajadores a los que despiden: «¿Por qué el trabajador no le paga 45 días por cada año que la empresa le ha estado pagando un sueldo y le ha dado trabajo?
El invitado a la tertulia 'El Filandón' que organizan Diario de León y La 8 de Televisión Castilla y León y que se emitió anoche insistió en su tesis de que «contratar y despedir debe ser natural. Lo siento porque las personas tienen nombre y apellidos, pero el empresario tiene que tenerlo fácil para contratar y despedir. El drama humano es duro, pero la realidad manda y es mucho más dura. Hay que tomar medidas. ¿Cuáles? Todas. Puede sonar muy liberal, pero es así. Una persona que ha dejado diez años en una empresa, cuando se va tiene una indemnización. Una empresa que da diez años de trabajo a una persona ¿por qué además tiene que pagar? No podemos dar por válidos los axiomas de toda la vida. ¿Por qué el trabajador no le paga a la empresa 45 días por cada año que ha trabajado por haberle dado trabajo? Hay que ser imaginativos. No digo que haya que abaratar despidos ni bajar salarios. Yo digo que todo tiene que ser más natural. Una buena opción sería meter la parte proporcional de la indemnización en el sueldo, para no tener que pagar en el despido».
«Lo de entrar en una empresa y morirse en ella, eso ya no existe. Ese momento del despido es muy duro para una empresa y no le veo razón de ser», explicó Crego.
Minería
«¿Hasta cuándo hay que seguir subvencionando a la minería?», se preguntó también. «El carbón no es estratégico ni la energía tampoco. Nos entra energía y carbón de fuera ¿y son estratégicos? ¿Cuánto se han invertido en ayudas a las cuencas?. ¿Dónde está el retorno de esa inversión de 700 millones? Un grupo empresarial compraría el mundo con ese dinero. Cuando el dinero no es de nadie, del uso que se hace con ello se pone el pelo de punta. Con 700 millones se podrían haber hecho las cuencas mineras nuevas. El trabajo de un minero tiene valor, es aguerrido. El lado humano es espectacular. Pero hay que ser fríos. Mi familia y yo venimos de cuencas mineras y digo muy claro que no sé a dónde se ha ido todo ese dinero que se ha dado en subvenciones con dinero de todos. Si a mí me dan diez millones de euros para llevar mi empresa de Onzonilla a Villablino, mañana estoy allí. Esas zonas están muy castigadas porque no se han hecho las cosas bien».
El futuro de León como provincia y de la juventud también se sometió a su particular prisma. «Hay que desdramatizar y ser más natural. Los chavales tienen que formarse pero la movilidad geográfica tiene que ser más natural. Muchos nos hemos tenido que ir de España y eso tiene que ser menos dramático. Hay que formarse bien en lo que a uno guste, en León o en Huelva, y a partir de ahí hay que buscarse la vida en tu pueblo o fuera del entorno».
No más subvenciones
Una crítica a las políticas de subvenciones. «Las organizaciones empresariales no deben recibir subvenciones. Deben vivir de las cuotas de su socios. Hay que ser imaginativos. Que las asociaciones organicen cursos de formación me chirría. ¿Qué hacemos invadiendo un sector como el de la formación? La idea no me gusta. Hay que buscarse los fondos y la vida».
El mito de las nuevas tecnologías tiene matices. «Las tecnologías son como el inglés, tiene que ser natural, no un objetivo. Debe ser como el comer, universal. Algún día habrá una bolsa de empleo importante, pero el problema lo tendrán los que tienen una formación muy básica. Cuando la rueda empiece a funcionar ¿qué hacemos con cuatro millones de personas que no tienen formación?».
Críticas al futuro del país. «La imagen de España desde fuera ya se percibe de otra forma. Antes era un desastre y ahora están volviendo. Quizá vuelve una parte porque ya se han hecho una serie de reformas que nos han hecho más competitivos. Pero una parte de los fondos que llegan son para comprarnos a precio de chiste. En materia económica hemos retrocedido unos cuantos años. Lo que pasa es que había que ser competitivos. Hace siete años los datos macro fueron malos pero tardó dos o tres años en llegar a las personas. Vamos a ver cuánto tarda en llegar lo bueno».
Ya sufre las primeras críticas internas. «Cuando propuse las siete vicepresidencias, ya me querían cesar. Porque toda la vida había habido tres. ¿Por qué? No hay que encorsetarse en lo de toda la vida». La salida a la crisis es complicada. «Los expertos no ven solución sencilla ni la luz. Pero para salir hay que apostar más por el empresariado que por otra vía, porque de fuera no va a venir Mr. Marshall».
Un futuro para León: «Pasa por la tecnología. A las cuencas mineras no se puede ir por autopistas y es más fácil tirar un cable de fibra y crear alternativas fáciles». Y otro para el desempleo: «Si el CEL supiera como crear el 26% de empleo que falta, no estaríamos en el CEL; estaríamos asesorando al Gobierno. Hay que flexibilizar todo mucho más».
Qué opinan los forofos del emprendimiento y la proactividad empresarial? Está claro que la culpa es de los trabajadores, pupilos de la vagancia y el conformismo que tanto caracteriza al español de la alpargata. Sólo saben pedir, cuando deberían dar gracias por no pagar a la empresa después de que esta les brinde esa maravillosa oportunidad de trabajar para ellos.
Ah, y no llevéis el tema de la discusión por otras declaraciones que hace. Está claro que aquí lo escandaloso es lo que pone el título.
Hitler era vegetariano y tenía un gran amor hacia los animales y la naturaleza. Ahá... Y? Pues eso.