Es un hecho que el Estado de las Autonomías es economicamente inviable y desde luego altamente ineficiente.
Que luego haya gente que políticamente defienda que sea más necesario tener gente en las adminsitraciones enchufados para hablar en catalán o en gallego que el no tener que rebajar las pensiones o que los jóvenes se vean sin futuro eso es otro cantar.
Pero el hecho está allí, el estado autonómico se ha convertido en una empresa donde colocar a los amigotes de la política, empezando por las televisiones públicas y terminando por cualquier administración inventada para cualquier gilipollez que se les ocurra