Para empezar, hay personajes que no tienen casi recorrido. Los hijos de Bittori y el Txato son casi testimoniales, el chaval que decide amargarse por completo (tampoco parecía el alma de la fiesta antes de la muerte de su padre) y ahí se queda; la hermana que parece traumada, pero nada más, te cuentan que se va a Alemania, que se pone rizos en el pelo, que se lleva mal con la madre,... estos dos no sé por donde pillarlos, tienen un tiempo en pantalla que es difícil de justificar, no hay profundidad en ellos.
Bittori es otro personaje bastante raro, se marcha del pueblo y parece que ha vivido aislada en Donosti y de repente le da por volver porque se muere; le llaman la loca (no te explican porqué). Al principio no quiere saber nada de los etarras cuando la hija quiere meterse a un programa de reinserción de presos, pero luego quiere hablar con Jose Mari porque se muere y quiere saber qué sucedió realmente...
Lo de los padres de José Mari es de juzgado de guardia, tienes que intuir que la madre se radicaliza. Y no culpa a los de la ETA por haber captado a su hijo, como sería normal después de disgustarse por verlo de Kale Borroka, sino que le parece hasta bien que se meta a etarra. Imagino que en el libro te lo explicaran mejor, pero es como si tu madre te castiga por fumar un día y al siguiente te apoya a meterte jaco... El padre aún se ve que se da a la botella cuando muere el Txato y bueno, algo es algo.
Los hermanos de José Mari otros que tal bailan. La hermana casi pierde al hijo y al marido en un atentado y la abuela sigue a lo suyo; ella se queda parapléjica, el otro la abandona y los niños aparecen dos veces en la serie... ella alejada de ellos con los padres... no sé, un personaje que le ablanda el corazón al etarra y actúa de puente entre Bittori y su familia. Crítica con la ETA desde el principio y con poca evolución.
Gorka ya se lleva la palma, La escena del hospital hablando con la hija del novio y de repente ZP en la televisión anunciando el matrimonio homosexual es de juzgado de guardia... Abertzale pero pacífico, literato en euskera que critica la violencia con hermano etarra. No aporta nada más allá de servir para que José Mari parezca un homófobo cuando lo visita en la cárcel.
José Mari, el personaje más interesante y que más podía dar de sí termina pareciendo un guiñapo. Ni te explican porqué se radicaliza, ni te dicen porqué no da su brazo a torcer con la Via Nanclares, nada. Es un etarra sin muchos dedos de frente que se dedica a pegar tiros porque le han dicho que es lo que tiene que hacer. Imagino que en el libro será diferente y te explicarán qué lleva a un chaval con una vida normal a coger una pistola y ponerse a pegar tiros.
La serie se la pones a uno de fuera y no se entera de nada, ¿qué es ETA?¿Una organización mafiosa?¿Por qué los ciudadanos apoyan a una banda terrorista?¿Por qué hay tanto simpatizante de ese grupo terrorista? Pones esta serie fuera de España y la gente ve una historia de un chaval que mata a un amigo de su padre al que su pueblo hace el vacío por no dejarse extorsionar. Muy apresurado todo y muy poco explicado. Realmente, el resumen de toda la serie se encuentra en la conversación entre el carnicero y el padre de José Mari, tengo la sensación de que es el punto al que quería ir la serie y lo demás casi que hasta sobra.