Viaje Costa Este USA 2009 - Diario de abordo

Día 1 – Financial District

El hotel es un poco extraño, tiene baño compartido y algún día tenemos que andar vivos para poder ducharnos y no perder mucho tiempo. La habitación tiene un aprobado raspado, pero bueno, solo la queremos para pernoctar, así que no nos molesta mucho. Es cierto eso que dijeron en callejeros viajeros de que las ventanas no se pueden abrir, la única forma de ventilar es usando el aire acondicionado… Por lo demás, con muchas ganas ya de salir a conocer mundo.

Lo primero es lo primero, hay que desayunar, por lo que paramos en un mini-camión-puesto de comida, en el que por unos 7 dólares nos comemos cada uno un bollo y un café. Importante, allí el café pequeño es más grande que cualquier café con leche de aquí. Y si os gusta cuidaros, pedirlo sugar free, porque de lo contrario te meten casi medio kilo de azúcar…

Con la tripa llena, nos disponemos a bajar a Financial District. Después de un breve estudio al que va a ser nuestro fiel compañero en NY (estamos hablando del mapa del metro) nos dirigimos al mismo y sin ningún problema llegamos a nuestra primera parada. Damos un par de pasos y nos encontramos el famoso toro de financial district, que, según dicen, trata de representar los buenos resultados en la bolsa. Se dice que un toro cuando cornea, lo hace hacia arriba, de ahí la similitud con la buena economía…

Bien, una cosa muy característica de NY es, obviamente, sus rascacielos. Al principio cuesta acostumbrarse a ellos y se está constantemente haciendo giros de cuello peligrosos para nuestra propia salud… pero pasados unos días ya casi paseas como un neoyorquino más.

Es tal la alegría que teníamos en esos momentos que hasta echamos fotos a un camión con baños ¿?¿?

Después de flipar como una hora sin parar, ya decidimos centrarnos y visitar lo planeado. Nos hicimos un pequeño esquema de las zonas/monumentos/lugares de mayor interés en cada barrio/zona a visitar cada día, de tal forma que una vez que lo viéramos lo tachábamos y seguíamos la visita.

Un lugar de total interés en NY es la estatua de la libertad. Todo el mundo nos había dicho que no merecía la pena ir a la isla. Era cara, estaba llena de guiris (con label 100% guiri) y se perdía mucho tiempo. La mejor solución era coger el ferry a Staten Island, ya que era gratis, pasaba a escasos 300-500 metros de la estatua y encima te regalaba una panorámica del sur de Manhattan preciosa. Y además nos sentimos un poco más como en casa entrando al ferry, ya que al ser gratis, estaba llenito de españoles (mira que somos&#8230.

En ese barrio se encuentra el Battery Park, que es el segundo en importancia de la ciudad después de Central Park. No es nada del otro mundo pero allí hay mucha vida (en todos los parques de EEUU hay gente haciendo de todo), unas vistas interesantes, un memorial y algo que nos dio más de un escalofrío: Una esfera que se encontraba en el interior de las tristemente famosas torres del World Trade Center. La han colocado en el parque tal cual como quedó aquel día, acompañada de una llama que arde constantemente.

Hay que recordar que los americanos son SUPER patriotas y les encanta todo lo que tenga que ver con su libertad, su independencia y esas chorradas. Luego en cualquier sitio de éstos se les hincha el pecho o ponen caras de poker bastante curiosas. Otra cultura.

Una vez nos refrescamos del calor que hacía, nos dirigimos a la zona financiera del barrio financiero, es decir, a Wall Street. Mientras íbamos a esa calle pasamos por Broadway, que pensábamos que era una calle relativamente pequeña de NY, pero no, cruza prácticamente Manhattan de norte a sur, luego tiene varios kms a recorrer. Así que, atravesando Broadway en la zona sur de la ciudad nos encontramos con esta iglesia, que es una de las 2-3 más importantes de NY por antigüedad.

Antes de llegar a Wall Street nos dimos un paseo por la zona cero que está literalmente hecha una mierda, y el edificio/monumento que van a montar está tan poco avanzado por los constantes debates políticos y sociales que lo único que han hecho ha sido retrasar unas obras que deberían haber acabado hace años.

Emprendemos la marcha a Wall Street y nos encontramos…

Y nos vamos acercando a Wall Street…

Hacemos un break para comer en una hamburguesería ecológica (no transgénica) regentada por un ex broker de la bolsa neoyorquina (según nuestra guía del lonely planet). Nos salió por unos 30 dólares y estuvo bastante buena, nada que ver con el McDonalds de la noche anterior.

Dejamos las finanzas de lado y nos ponemos rumbo al conocidísimo puente de Brooklyn. Antes de llegar, nos paramos en el Pier 17 (Pier=muelle). NY es una ciudad cuasi-costera, así que en otra época entraban muchos barcos. Manhattan, al ser una especie de península, estaba llena de muelles, pero el 17 es el más bonito según nuestras guías, por lo que le echamos unas fotillos.

Son las cuatro de la tarde y estamos completamente reventados, pero todavía nos queda un lugar donde se han hecho infinidad de escenas de películas…

Se va acabando el día (sobre las 7-7:30 se hace de noche) y nos vamos dirigiendo a la costa para ver un atardecer prometedor. Pero antes nos encontramos con una curiosa escena.

Y el atardecer…

Como todavía teníamos fuerzas para ver algo más, nos vimos obligados a coger el metro para ir a ver uno de los mayores espectáculos gratuitos de la ciudad.

Nos dirigimos al hotel y cenamos fruta y/o yogur en una deli que hay al lado de nuestra residencia. Conviene decir que “deli’s” hay por doquier en NY, son tiendas donde puedes coger comida a buffet (de fruta, de fritanga, de ensaladas&#8230, pesarla y comerla allí tranquilamente. Nosotros tomamos como costumbre cenar todos los días en ese local. Por 6-7 dólares por cabeza se comía fruta de todas las temporadas (parece que en NY puedes comer melón o frambuesas en pleno invierno). Una gozada.

Día 1 completado

Día 3 – Outlets y SoHo

Un fiasco. Así es como definiría este día. Totalmente perdido. Os explico, mucha mucha de la información que conseguimos sobre EEUU en general y NY en particular está en el foro losviajeros.com. Hay de todos los países una barbaridad de información y ya si os metéis en el apartado EEUU pues os pueden dar espasmos de todo lo que hay que leer. Pero claro, hay que leerlo. Y uno de los temas más relevantes es el de las compras.

Tal y como están las cosas con el euro/dólar estos últimos años es lógico que ir a América suponga pensar en ir de tiendas y gastar y gastar. Por esto, me puse a buscar info acerca de las tiendas y centros comerciales de NY. En cuanto a la ciudad en sí, hay gente que dice que lo mejor es perderse por sus calles y entrar en las tiendas que a uno le apetezca y probar. Dado que todo está algo más barato gracias al poder del euro, se encuentran cosas a buenos precios. Existen otras personas que dirán que ir al 21th Century (ya visto en el día 1) es lo mejor y es una visita obligada (como turista lo recomiendo, pero a gastar allá cada cual con su dinero). Y por último están los que sugieren ir a visitar un outlet.

En USA los outlets son como todo allí, GIGANTES. Y cuando digo esto, me refiero a que el outlet que visitamos era como un pequeño pueblo de tienditas. Os pongo en situación, se suele recomendar visitar un outlet cercano a NY cuando se va una semana o más de visita. De lo contrario probablemente pierdas un día de compras y te queden sin ver algo vital de la ciudad. Nosotros teníamos tiempo (justos pero bien) así que le di la tabarra a mi novia para ir. En los foros hablaban muy bien de los “Premium outlets”, una especie de cadena a nivel nacional y en concreto del de Nueva Jersey (NJ Premium Outlet.

Si pincháis veréis todas las marcas que se venden (no son pocas ni mucho menos). Por abreviar, podemos ver desde nike, adidas y puma hasta gucci, prada y calvin klein pasando por tommy hilfiger, hugo boss, etc… Hay de todo un poco. Yo estaba esperanzado diciendo, bueno, me voy a renovar el vestuario. Pues no. Un desastre, no se si éramos nosotros o qué, pero nos decepcionó porque no encontramos nada realmente interesante que no se encuentre en España.

El caso es que para ir a estos outlets, hay que pagar 45 dólares de autobús ida y vuelta (el trayecto es una hora). En cuanto llegamos, vimos gente con maletas y nos preguntamos que coño hacían con maletas de tiendas. Pues bien, a medida que pasaban las horas nos dimos cuenta que era para ir metiendo sus compras en las mismas. Y cuando digo maletas me refiero a baúles, arcones y casi ataúdes de grandes xD.

Dimos un paseo, vimos prácticamente todas las tiendas que nos interesaban y sí, un polo en tommy hilfiger unos 20 dólares, una colonia en ck unos 50 dólares, unas converse típicas 35 dólares… Luego podías ir de tiendas de mucho caché y relojes tag heder por 500 a 2000 dólares… Mención especial a la tienda de Levis, que tenía el mayor número de pantalones vaqueros que he visto por metro cuadrado en mi vida, psicológicamente me dejó roto, pasé de empezar a probarme tallas y tal porque eso era una locura. Nota para mujeres: ahora están de moda los pantalones skinned (muy pegados) y ultra-skinned (es casi llevar una segunda piel encima). A los que recuerden a Ross en Friends quitándose los pantalones de cuero con polvos de talco se harán una idea XD.

Estaba bien, pero aparte de que la ropa no encajaba especialmente con nuestro estilo, sentíamos perder el tiempo teniendo una ciudad como NY todavía a medio visitar.

Como no queríamos perder más el tiempo, nos fuimos directos a coger el primer bus a NY (suelen pasar cada hora hasta las 21:00 o así). Y a eso de las 19:00 nos fuimos a ver lo que pudiéramos de SoHo. Se nos echó la noche encima y simplemente nos dedicamos a pasear viendo alguna galería de arte (suelen ser gratuitas). En las calles principales había tiendas de marcas muy conocidas (entrar a Victoria’s Secret y ver los carteles gigantes de Miranda Kerr o Adriana Lima merecía realmente la pena). Y cuanto más nos alejábamos de éstas, más galerías de artes, tiendas “alternativas” y gente bohemia nos encontrábamos.

Y poco a poco, comenzamos a subir calles dirección a nuestro hotel, hasta que decidimos que estábamos muy cansados para andar y cogimos la primera parada del metro para llegar al hotel (pasando antes por la deli a comer rica fruta )

Día 3 completado

Día – MoMA – Grand Central Terminal – Museo de cera

¡Ay por dios! Cada día cuesta más levantarse. Esto es un sin vivir, nos lo estamos pasando como enanos pero el cuerpo no responde. Parece que la comida y las caminatas nos están dejando hechos polvo. Pero ea, somos jóvenes y hay que demostrarlo, así que nos dirigimos a la calle y oh, no! Lluvia.

Y ahora qué hacemos? Pues en una ciudad como NY no pasa nada. Todo tiene un plan B que puede ser incluso mejor que el A. En prácticamente todas las guías recomiendan dejar los museos para los días lluviosos. Dado que es una ciudad que recibe visitantes durante todo el año, los servicios están preparados para ello, darnos ocio.

Hay que tener en cuenta que los turistas que viajan en pleno invierno se deben de comer nevadas bastante copiosas, mucho frío (más que el de Euskadi no creo ostia pues!) y demás inclemencias metereológicas. Nosotros estamos en pleno agosto y hace calor, así que sólo hay que solventar el problema del paraguas y esperar a que pare.

Nos dirigimos a la frutería a coger algo para desayunar (si si, acabaréis amando la fruta en NY) y le preguntamos al tendero a ver dónde podemos comprar un paraguas barato. Y claro, en esta ciudad hay de todo en todas partes así que nos señala un quisco que hay justo enfrente. Me temo que nos la van a clavar y … un paraguas 4 dólares! Pues póngame dos, amigo, y así, si me peleo con la parienta, tengo para ir más aireado

Al ver que seguía lloviendo y que tenía intención de ser para largo, optamos por el plan B, los museos. En NY hay dos que sobresalen por encima del resto para el turista medio (me refiero al que viene a ver de todo un poco, nada especializado). Éstos son el MoMA (Museum of Modern Art) y el Metropolitan. Del segundo hablaré mañana, que es cuando haremos la visita.

Del MoMA se puede decir que es uno de los museos más importantes del mundo para los artistas modernistas y esas cosas (no controlo mucho al respecto). De hecho, para muchos es el mejor. Hay obras de artistas como Van Gogh, Picasso y Andy Warhol. Creo que para cualquiera que no le guste mucho el arte también son nombres de referencia y si apuramos un poco nuestros conocimientos, sabremos que son estilos que distan mucho de parecerse.

El caso es que en las guías sugieren dejar las visitas a los museos para los días que salgan rana (que en esta ciudad pueden ser muchos), por lo que elegimos el 5º día del viaje para ir a visitarlo. Cogimos rumbo al metro y allí aprovechamos para hacer una foto (se supone que está prohibido).

La visita fue un día entre semana. Al llegar, vimos que no lo abrían hasta las 10:00h, así que nos dio tiempo a descansar en su recepción y a hacer cola para coger nuestra entrada. Si mal no recuerdo, el precio era de 12 dólares por persona y carnet de estudiante (student card FTW!).

Las 10:00h. Hacemos cola para entrar y vemos que los auriculares para hacer la visita en nuestro idioma son gratis (todo un detalle). Pena que lo que cuentan los auriculares es un constante coñazo para cualquiera que no domine el mundillo del arte. Casualidades de la vida, que mi novia (ingeniera en diseño industrial, ahí es ná) acabó el proyecto de carrera hace unos meses y había estudiado varios diseñadores hacía muy poco. Y digo casualidades, porque había una exposición de uno de los que más le gustaban en la última planta. Un tal Ron Arad que presentaba una colección muy completa de sillas de diseño.

Después fuimos desde la última planta a la primera viendo cuadros, esculturas y demás modernidades entre las que, de vez en cuando, veía algún cuadro que sí que me sonaba o recordaba de algo. A ver si a vosotros también os suenan.

Tras tres o cuatro horas en el museo, decidimos desculturalizarnos un poco y emprendemos ruta hacia la Grand Central Terminal (lloviendo todavía). Antes de llegar, nos cruzamos con el Radio City Music Hall, un teatro situado entre el MoMA y Times Square y al lado de Rockefeller Center. Es considerado el más importante de todo el país (en una semana daba varios conciertos Aretha Franklin).

Continuamos la marcha y llegamos a la Grand Central Terminal. Debe de ser la estación de trenes más grande en el mundo en número de andenes, con 44 y 67 vías. Conecta trenes con el metro y fue construida en 1913, recibiendo varios nombres como Grand Central Station o Grand Central. Para los turistas también resulta ser un sitio a fotografiar por la cantidad de películas que se han rodado en su interior (sin ir más lejos la última de mafiosos de Johnny Depp).

A mí me encantó la profundidad de su techo, la amplitud de su patio central y la cantidad de gente que fluía constantemente sin sorprenderse. Parecía que estaban todos coordinados y bueno, después de ver la coreografía que se cascaron los de Improveverywhere nos podíamos esperar cualquier cosa. Video

Todavía nos queda un rato para comer algo, así que nos damos un paseo por los alrededores de la estación y de repente nos encontramos… más rascacielos.

De camino a las calles cercanas a Times Square (que nos quedaban por ver), nos topamos con la biblioteca de NY. Lo típico, un edifico de corte relativamente clásico, con su policía a la entrada registrando bolsos y mochilas para evitar sustos, mucho turista y algún neoyorquino con ganas de culturizarse.

Bueno, ya sí, ya teníamos hambre y después de haber comido hamburguesas, comida mejicana, chino y alguna que otra guarrería, nos decidimos por probar comida de “Sbarro” una cadena italo-americana de comida rápida. Es sencillo, coges una bandeja y vas pasando por los mostradores, si ves algo que te gusta lo pides y te lo recalientan para que vayas a pagar a caja. Había pasta, ensaladas, frutas, tipos de panes y cómo no, pizzas. La pizza en EEUU no se pide, normalmente, como en Europa. Las porciones son muy grandes (mucho), así que no verás a casi nadie pedir una pizza entera, sino una o dos porciones (aunque otro día comimos en un Pizza Hut una mediana y bien).

Uy la modorra, ay que nos dan ganas de echarnos la siesta. Pero no, en NY no hay tiempo para débiles del roncar. Con las pilas puestas de nuevo, nos vamos a las calles perpendiculares a la plaza de Times Square, que tenían pinta de tener bastantes luces y colores para curiosear un rato.

Y de repente nos encontramos el Madame Tussauds. O lo que es lo mismo, el museo de cera de NY. Ya sabréis que hay en muchas capitales mundiales, que de vez en cuando sale en la tele algún famosete posando con su réplica de cera. Bueno, pues viendo que se hacía de noche y que teníamos curiosidad por ver el, tal vez, museo de cera más grande del mundo… optamos por entrar.

La entrada fue, en mi opinión, algo cara. Nos salió por 35 dólares por persona (el museo más caro de todos los que visitamos y el menos cultural, que cosas&#8230. Pero he de decir que si no habéis estado nunca en uno de éstos y os pica la curiosidad no lo dudéis: entrad. Os voy a mostrar una recopilación de las, probablemente, fotos más chorras del viaje (importante: os dejan hacer casi lo que queráis con los muñecos, así que conmigo abrieron la caja de pandora jaja).

El museo, definitivamente, mereció la pena. Nos sirvió para desconectar un poco del ajetreo de la ciudad y nos valió para entretenernos a base de bien. El museo te va guiando por diferentes salas, en primer lugar te puedes hacer una foto con Hulk a tamaño “real” y después visitas en una especie de plaza de cartón piedra a los famosos de Hollywood. Luego vas por diferentes salas (sin límite de tiempo) viendo deportistas, personajes de ficción, de terror, dibujos animados, superhéroes, presidentes de EEUU, personajes históricos, artistas famosos… De todo. Y también hubo tiempo para entrar a una película en 4D (entraba en el precio de la entrada) de Bob Esponja!. No habíamos visto nunca nada en 4D y fue super divertido, te pones las gafas 3D y en medio del corto te tiran burbujas, empieza a oler la sala a pepinillos, mostaza… y tu asiento se mueve, te tira aire y te presiona en la espalda. Unas risas. Por lo que si os apetece perder un buen rato, ir a este museo.

Al salir tomamos nuevas fotografías de esta zona.

Finalmente se iba haciendo de noche y otra vez las piernas nos estaban empezando a decir “Houston, we have a problem”. Y como pensamos que iban en serio, decidimos poner marcha a… ay dios, que todavía teníamos que ir a la Apple Store a comprar un pedido que me hicieron. Pues en marcha.

Y basta ya dijeron nuestros pies. A dormir se ha dicho, que todavía queda mucho más y mejor.

Día 5 completado

Día 7 – Harlem – Central Park

Hoy es un día especial, nos levantamos algo preocupados, nuestra estancia en NY se acaba. Sentimos una mezcla de alegría y tristeza. Alegría porque el viaje continua y la verdad que está saliendo todo por encima de lo esperado. Tristeza porque NY se acaba y ya sabéis que no me cansaré de repetir que esta ciudad engancha.

Más o menos hemos visto todo lo que teníamos apuntado en la agenda sobre la ciudad. Cierto es que hemos hecho poco caso al barrio de SoHo (un par de paseos cortitos) y que podríamos haber intentado salir algo por la noche. La verdad es que salir por la noche debe ser realmente caro y como llegamos a esas horas totalmente abatidos, no nos preocupa en exceso. Eso que nos ahorramos.

Volviendo a lo que realmente importa, son las 9:00 a. m. y tenemos pendiente un día que por la mala meterología habíamos pospuesto un par de días. Hoy toca visitar Harlem y Central Park. La visita obligada al barrio más al norte de Manhattan (Harlem) es los domingos, ya que éste es el día en el que se reúnen sus habitantes en las iglesias para presenciar la misa. Y bueno, creo que a nadie se le escapa que las misas en Harlem son especialmente famosas por sus coros de Gospel (todos hemos visto Sister Act o similares, no?).

Por lo tanto, la visita a Harlem debe ser un domingo si o si. En cambio, a Central Park hay que acudir un día que haga muy buen tiempo y a ser posible que sea festivo, ya explicaré porqué a los que no caigan en el motivo.

Harlem. Barrio predominantemente negro o afroamericano (según lo exigentes que seáis conmigo), lleno de historia ligada a la música y turístico por dos cosas por encima de lo demás: las misas Gospel y el teatro Apollo. El otro barrio afroamericano es el Bronx, que, a pesar de su relativa mala fama debe ser totalmente normal durante el día (claro que por las noches, como en casi cualquier ciudad grande es peligroso). Al Bronx no acudimos por ser carente de interés turístico (o así se pinta en varias guías). Harlem se encuentra ubicado justamente al norte de Central Park, de hecho es la zona de Manhattan que más al norte se encuentra. Me atrevo a decir que visitarlo entre semana tendrá un algo especial que no tiene los domingos. El domingo es el día que se llena literalmente de turistas por la misa Gospel así que para los que no estén interesados en acudir a una y quieren vivir la esencia de lo que se vive, que acudan entre semana (aunque el mayor atractivo es la misa sin ninguna discusión). Para el que quiera más información, le remito a la santa wikipedia.

Sin más dilaciones comienza la batería de fotografías:

Acabamos el paseo por Harlem, y nos vamos acercando a la universidad de Columbia. Intentamos adentrarnos por las calles de este barrio para ver si podemos captar algún momento típico de la zona pero lo único que encontramos son zonas residenciales completamente vacías (será por ser domingo). Dado que no nos llama mucho la atención la universidad de Columbia (veremos en breve Yale y Harvard) cogemos el metro y nos vamos a Central Park.

Central Park no es un parque… es el PARQUE. En extensión no nos podíamos hacer a la idea de lo grande que iba a llegar a ser, y bueno, es monstruosamente monstruoso (valga la redundancia). Se le puede dedicar, sin ningún problema, un día entero. Lo ideal es visitarlo de norte a sur o viceversa, ya que es más largo que ancho (bastante). Paseando se puede llegar de un extremo a otro (N-S) en un par de horas y de este a oeste en 20-30 minutos.

Por una parte, el parque está perfectamente cuidado, dan ganas de tumbarse y revolcarse por él en cualquier parte, o de hacer cualquier tipo de deporte, o simplemente descansar con un buen libro… Hay de todo y para todos. Entre las cosas más sorprendentes se encuentran varios campos de béisbol en medio del mismo, unas explanadas de hierba gigantes o un estanque (que antes abastecía a la ciudad) u otro similar pero con barcazas para paseos románticos. Os paso el link de la wikipedia, que tiene muchísima información .

Qué decir de NY. Hasta el día de hoy es la ciudad que más me ha gustado de las no pocas que he visto en mi vida. A modo resumen me parece una ciudad llena de vida, tanto de día como de noche, en la que no hay momento para el aburrimiento. Tiene grandísimos contrastes (desde Chinatown hasta Harlem pasando por cualquier rascacielos o Times Square). Comer es toda una experiencia, si te gustan los grandes retos, prueba a comer cada día un tipo de comida diferente (indio, mejicano, chino, americano, italiano&#8230. Lo más caro es, sin duda, el hotel y además no son de calidad aún sin ser baratos.

Bueno, toca acostarse y dormir, que mañana hay que ir al aeropuerto de Newark a coger el coche de alquiler y poner rumbo a Boston. La segunda fase del viaje comienza en menos de 12 horas. Go Celtics!

Día 7 completado

#10 en primer lugar lo hago porque hay gente en MV q me ha pedido que lo haga.

En segundo lugar, tan dificil es no acudir al post si no te interesa?

En tercer lugar, creo que este post aporta mucho más que un "ak o colt", "creo que me voy a tirar a mi prima" o "Creeis que las drogas crean dependencia?".

Ale, tira al colegio q llegas tarde