El ayuntamiento de Barcelona ha comunicado a Antonio y su familia que deben abandonar su casa después de 40 años trabajando como conserje en un colegio público de la ciudad condal. Antonio, que acaba de cumplir 86, vive en el domicilio del centro público junto a su mujer, su hija y su nieta de 17 años.
Antonio comenzó a trabajar como conserje debido a que le tuvieron que amputar una pierna cuando era guardia urbano. Desde que entró en el colegio ha tenido que trabajar muchas horas e incluso contratar, con el dinero de su bolsillo, a un sustituto durante su periodo de vacaciones para que hiciera su laborales. El ayuntamiento le ha avisado que debe dejar la casa porque es de titularidad pública. Se lo comunicaron a través de una llamada de teléfono. Este procedimiento no es el habitual ya que a otras personas, en su misma situación, se lo han notificado con una carta.
Su hija Rosi, que vive con sus padres en esta casa, ha pasado este lunes por los micrófonos de Mediodía COPE y ha explicado que sus abogados les han dicho que, en base a la documentación que existe, a los 20 años de vivir en dicha casa pasaba, pagando las escrituras, a la titularidad de Antonio. "Mi padre está destrozado y mi madre ha tenido que recurrir a la medicación. Han pasado toda su vida en esta casa", asegura Rosi.
Pero no solo la familia de Antonio se están movilizando. Los alumnos que pasaron por este colegio, y que conocieron a Antonio, han abierto una solicitud en changes.org para ayudarle, ya han superado las 85.000 firmas y esperan llegar a 125.000 muy pronto.
-¿Como es posible que la abanderada de los desahucios cometa estos atropellos contra la ciudadanía de origen español?
-¿Permite que los extranjeros ilegales campen por su ciudad pero sin embargo aplica el peso de ley a los españoles de origen?