Buenas,
Vengo aquí a contar lo sucedido esta mañana. Resulta que he ido a comprar unas gafas de sol graduadas y me ha acompañado mi madre. Todo iba bien, hasta que he tenido que decir la graduación que tenía en las ojos.La graducación que tengo en papel es de hace un año (del oftalmologo) y como igual me había cambiado, decidimos que me lo miraran allí mismo. Es decir, que me hicieran lo de ir probando con las lentes para ver exactamente qué graduación tengo.
Bien, hasta ahí el relato de situación, ahora empieza lo gore. Mi madre ve que llaman a una chica para que me revise la vista, entramos en donde tiene todos los aparatos y cerramos la puerta. Cuando estoy a punto de sentarme entra mi madre y le dice a la chica que no la quiere, que quiere que me revise la vista otro, un hombre, y le dice que vaya a buscar al otro optometrista. A todo esto, la chica es peruana. Yo reacciono diciendole a mi madre que se calme, que quiero que me lo haga ella, a lo que mi madre dice que no, que quiere a alguien "que haya estudiado en españa, no a alguien que ha venido a quitarnos el trabajo y con unos estudios convalidados de universidades de a saber dios donde".
La cosa se tensa, y la chica sale al paso preguntandome si soy mayor de edad a lo que le respondo que sí, por lo tanto, puedo elegir quién me mira la vista y quién no. Mi madre como no sabe por donde salir, me dice: "Vale, pero ahora las gafas te las pagas tú", y con esto, da un portazo a la sala de graduación y se va a la calle a un banco.
El caso es que me he sentido mal por dos cosas: la primera por ver como mi madre pierde los papeles con esto de la inmigración, cosa que no me extraña, ya que no conoce a nadie de otra raza y está condicionada por como se les suele poner en todos los informativos de tv.
Y la segunda, por ponerme en el lugar de la chica peruana que me atendió (muy bien por cierto y respondiendo con total claridad a todas las preguntas que le hize) y pensar lo bochornoso que puede resultar que alguien te discrimine por la raza.
Evidentemente, estoy de acuerdo con mi madre de que ella paga y ella elige quién le atiende y quién no, pero le fallaron profundamente las maneras. No es posible discriminar a nadie por la raza, no podemos caer tan bajo - y así se lo he intentado explicar hasta ahora, sin logro alguno - pero ella sigue en sus trece.
¿Qué opinais?
¿Estáis de acuerdo de cómo actuó mi madre? ¿Conocéis a gente que suela actuar así?
pd: respeto plz
