Lo que me puede aterrorizar es la eterna oscuridad, la eterna inexistencia tras la muerte. Realmente podemos desaparecer así, tan simplemente?
No somos energía? La energía, no dicen que no se destruye, pues solo se transforma?
Por otro lado, la humanidad lleva tratando de aceptarlo desde que aparecieron los primeros entierros (muestra de algo parecido a una creencia o religión) (hablamos de hace unos 120.000 años con la aparición del Homo Neanderthalensis). Así que para encontrar la paz interior, creo que lo que debes hacer es evadirte y darte cuenta de la imposibilidad de comprender el fin metafísico al que puede estar sometido el ser.
Y esto lo podemos relacionar con el instinto humano de conocer el sentido de la vida. ¿Qué sentido puede tener el vivir? ¿Tiene valor en si mismo, si al fin y al cabo es algo efímero, con un comienzo y un fin definidos, habiendo un plazo relativamente corto entre estos?
¿Pero por qué no iba a tenerlo?
Nacer para morir... O morir por culpa de cualquier desgraciado... Morir por una enfermedad, incluso por un error técnico... de un día para otro... Lleva a preguntarnos "Joder, y todo lo anterior... ¿para qué...?"
Entonces se nos ocurre pensar en el Destino, en dar una explicación a todo esto que no podemos entender... De hecho esto hace plantearme algo que puede resultar paradójico...:
Nuestra mente no es capaz de entender la infinitud más allá de como concepto, sin embargo nos esforzamos en negar la finitud, el final de TODO. Y digo "todo" porque desde un punto de vista individualista (que no egocéntrico), al morir lo perdemos absolutamente... "todo".
No quiero extenderme... pero has iniciado un tema que da para paginas y paginas de reflexión, ilusiones, mentiras y demás.