Quiero opiniones objetivas, necesito algo, está claro.
No me es problema alguna expresar mis problemas o debilidades al público, soy consciente de qué puede ocurrir, pero creo estar preparado para ello.
Soy una persona tranquila, esta línea quizás os choque o os parezca contradictoria con el texto que viene a continuación. Llevo mucho tiempo siendo tratado psicológica y psiquiatramente, pero quiero hacer recalcar estos últimos tiempos, omitiré algunos detalles que creo importantes pero es mejor evitar hacer daño, mi moral no me deja.
Me han visto psicólogos, neurólogos, neuropsicólogos, cardiólogos, psiquiatras... bueno, una alta gama de médicos, y varias visitas a urgencias que a medida que estoy peor han ido bajando, de hecho llevo bastante sin ir desde que estoy mucho peor, pero es cuestión de tiempo cuando se trata de nervios, ¿capisci? Raro, ¿no parece?
Bueno, he tenido épocas felices, épocas tristes, como todo ser humano, bien. Ahora llevo una racha bastante grande de una época terriblemente mala, por diferentes razones, pero claro está que el revés más grande fue a finales de noviembre principios de diciembre con un cambio de medicación. Siempre las he visto como drogas, no es ningún secreto, he "jugado" con ellas con mucha cautela, salió mal, así que aprendí de ello y nada más de jugar con ellas. Llegó el cambio de medicación y me dio un efecto rebote, haciéndolo todo como se debía, y aquello comparado con "jugar" con la medicación fue una simple caricia. También decir, que la culpa no es de nadie, ni de la persona que lo recetó, ni de nada, eso son cosas que pasan sin que se pueda saber, lógicamente. Bueno, ahorrando algo de detalles me dejó muy maltrecho, 3 semanas con dolores que me atravesaban desde la espalda al pecho, sólo podía estar en el sofá o sentado en el coche, era estar en el ordenador 5 minutos, peluquería o cualquier otra silla y reventar. Temblores durante 2 meses (totalmente involuntarios) y... cosas raras.
Qué duro es, tener a tu hermana que la quieres como una segunda madre, que tenga a su hija (mi sobrina) y no sentir nada, cuando quien me conoce sabe que me encantan los niños, y ya en un círculo cerrado lo que mi hermana representa en mi vida, y esa sobrina tan maravillosa... maldita apatía, no sentir nada ese día, mi madre llorando en mis brazos diciendo que era lo que más quería en esta vida junto a mi hermana, y yo... no sentir nada, con lo tremendamente sensible y sentimental que soy... me di realmente cuenta del alcance que tuvo todo o de hasta dónde llegué, no le deseo a nadie ese sentimiento, se me robó un día mágico, un día único en mi vida, y mi recuerdo de ese día es: apatía.
Por suerte, hay más días en la vida, y al final "compensa...".
Hacer todo lo posible para estar bien, dar paseos diarios, enfrentarse a los miedos, terapias psicológicas y neuropsicológicas, también multitud de pruebas de todo tipo, desde el corazón, la cabeza... cumplir objetivos diarios, semanales, hacer y realizar cosas que no creías posibles, terminarlas y terminarlas bien y... se va todo.
Ya llevo alrededor de 2 meses sin terapias psicológicas y neuropsicológicas, no había ya por dónde estrujarme. Neurológicamente sólo tengo un quiste en la cabeza, que sí, que suena igual un poco fuerte, pero es totalmente inofensivo, y todo lo demás perfectamente. Psiquiátricamente bajo medicación, la más fuerte del mercado para lo que tengo, bla bla...
En fin todo, e ir de nuevo al psiquiatra, decirle la realidad, decir que cada día perfectamente puedo tener de 5 a 7 ataques de pánico, algunos días más que ésos, otros menos, que condiciono la vida a todo lo que me rodea, porque es así, soy un escombro, no soy productivo, sólo consumo. Decidme, ¿qué hace uno sentado en frente del ordenador? Yo no genero dinero, yo sobre todo, no genero felicidad, genero gastos y disgustos, lo que tengo sobre mí es una losa grandísima, es una sensación que no se la deseo a nadie, absolutamente a nadie. Cuando uno cree haberlo dado todo, haber luchado y ver este resultado... es muy frustrante, más cuando llega un momento en que estás bien y vuelves a... caer, paulatinamente, hasta lo que es la situación actual. Ahora de salir nada, ahora es cama, PC, sofá, cama.
Lo que tengo ahora son ataques de pánico constantes, no son ataques de ansiedad, y estos ataques de pánicos no son comunes, aún nadie me los ha sabido paliar, la medicación hace menos que un vaso de agua, y no voy a tomar más porque mi cuerpo ya ha creado tolerancia y entonces se entra en un bucle enfermizo, que es la adicción, pero respecto a eso soy bastante fuerte mentalmente.
Creo que me sé casi todas las técnicas de relajación, de psicología de autocontrol, casi todo. Cuando me dan diariamente estos ataques de pánico, todo se centra cognitivamente, mis latidos tranquilos como quien lee esto ahora mismo, mi respiración tranquila como quien está durmiendo, ningún temblor como quien agarra algo con firmeza, ningún calor ni bochorno, ningún hormigueo, está todo en la cabeza, me anula mentalmente, toda la fuerza y el mal va hacia ella. Esto es todos los días, sin excepción, da igual cómo se me vea por fuera, lo que vivo por dentro es una realidad totalmente distinta.
¿No es un tanto raro que vayas a un especialista y le digas todo esto y se quede a cuadros? Con un suspiro, diciendo "Pues como no te busques a la mejor persona del mundo en técnicas de relajación...", etc, pero de buenas maneras, todo sea dicho. Nadie queda en mal lugar, la intención es ayudar, eso que quede claro.
¿No es raro que tenga tantísimos ataques de pánico al día? Que mi corazón esté el 90% de las veces perfecto en esas situaciones, mi respiración el 100%, pero mi cabeza... ¿Son realmente nervios? ¿Qué tengo? ¿Entendéis ahora el "capisci" de antes?
Da igual dónde esté, con quién esté, cómo esté, qué haya pasado, qué piense, qué pensaba, da igual todo. Viene y va cuando y como quiere, como si apretaras un botón. Lo peor es que estos ataques de pánicos tan constantes, de tanto que me dan, de 5 a 7 veces por día de media, casi ha pasado a ser un estado permanente (todo el día). Muchos sabréis que el cerebro se suele adaptar a las situaciones para que sufra menos, el mío aún no lo ha hecho, en absoluto.
Esta situación me condiciona casi prácticamente para todo.
Vivo, sé que estoy viviendo, pero es como una pesadilla, no siento que esté viviendo aunque sepa que esté vivo, tengo un deseo tan grande por sentir que estoy viviendo, llevo mucho sin sentirlo...
Sé que pude hacer mucho más para estar mejor, lo sé, siempre se puede dar más de sí y quizás ahora este texto no estaríais viéndolo. Soy consciente de ello.
Tal vez parezca que me como mucho la cabeza con ello, pero la verdad es que no, a pesar de este texto, pocas vueltas le doy a lo que me pasa, eso sería agravarlo, y me sé abstener bastante bien de ello, simplemente pasa, sin más, y las únicas veces que he intentado buscarle sentido como no lo he encontrado, pues lo dejo ir.
Mientras tanto, seguiré luchando, nunca rendirse, es algo que mi abuela materna me enseñó y se me quedó grabado a fuego. Da igual en qué tormenta estés, da igual que estés dentro del tornado, no te rindas y lucha. Creo que he agotado todas las opciones, pero la creencia y la realidad no siempre van unidas, y también creo, que a pesar de eso, siempre hay una solución para todo, siempre la hay, siempre hay algo, y lucharé por encontrarlo.
Como digo "Como vino se fue", espero algún día decir "Se fue como vino" y ayudar con mi experiencia a más personas. Hasta que mi corazón deje de latir, yo lucharé.