#6233 Eso te pasa por entrar al juego de darle instagram, Facebook y todas esas tonterías.
En la seducción hay que ir en una dirección y lo más rápido posible sin ser baboso. Tiene una similitud a las ventas. Cuando al cliente le das tiempo a que piense, es muy normal que la compra acabe enfriándose.
Yo no utilizo esas aplicaciones y cuando me las piden y les digo que no tengo porque no me gusta el uso que se les da, pero que tiene la oportunidad de conocerme más y mejor en persona y no por fotos donde la realidad se distorsiona. Les pongo el típico ejemplo de esa chica que se hace 20 fotos en cada sitio pero su vida es triste y aburrida.
Básicamente tienes que tener personalidad, y es mejor gustar por cómo la haces sentir cuando está contigo que no por si eres futbolista de segunda división y lo descubre por instagram.
Los tíos intentan comprar la atención de la tía y eso algunas veces funciona pero no se siente atraída por ti sino por lo que tú tienes.
Resumen: cierra el trato lo más rápido posible para quedar en persona sin pasar horas y horas hablando por internet y que la interacción se enfríe
#6241 Con asiáticas no tengo experiencia ni se cual es su cultura, pero lo que si se, es que en cualquier lugar del mundo el lenguaje no verbal es muy similar para todo.
Yo aprendí hablar inglés con las extranjeras que vienen a Ibiza sin tener ni idea del idioma, utilizando gestos y haciendo preguntas muy básicas. Está claro que con el chino es más difícil y solo se me ocurre que utilices la app de google traductor por voz y sobretodo el lenguaje no verbal. Una mirada es una mirada aquí y en china!
Por cierto estos días voy caminando por la calle intentando mirar a los ojos de las mujeres que me cruzo y estoy notando que muchas me aguantan la mirada y sonrisa. Lo digo por que todo es actitud. Si vas mirando el suelo o a sus tetas, te vera como uno más. Si le miras limpiamente a los ojos y lógicamente no eres un troll, les despiertas curiosidad en plan “me esta mirando a mi”? Y lo más importante, tú autoestima crece por qué sabes que tienes potencial