Quedé por primera vez con una chica que conocí por Tinder. Llevábamos hablando un par de semanas o así, y ayer por la noche quedamos para conocernos en persona. Respecto a esto, solamente os digo que la chica tenía un gripazo de la hostia. Yo estaba con un tabernero machaca bady (Yeah) tomándonos algo, sin intención de vernos ese día en principio. Le dije de vernos, sabiendo que estaba mala, insistí un poco y quedamos.
La cita como tal bien. Un par de cosas destacables: hubo un momento en el que nos acercamos un poco más, la acerqué un poco a mí y noté que no estaba cómoda en esa situación. Retrocedí y punto. Decidí volver a insistir otra vez, más adelante y cuando fuera buen momento, pero llegó un punto en el que se me bajó el punto que llevaba con el alcohol, la conversación no me interesaba lo más mínimo y prefería ser yo quien pusiera el punto y final a ese momento. Salimos del local, vamos camino de casa, y dice algo así como: "ah, que tú tb vienes por aquí? Pensaba que tu casa estaba por otro lado...". Ni me lo pensé. Dije: "tienes toda la razón! Nuestros caminos se acaban de separar irremediablemente. Encantado, X.". Me doy media vuelta, comienzo a andar, y no llevaba más de 5 segundos en mi camino cuando la oigo venir hacia mí, corriendo. "Oye, que lo decía de broma! Da igual si vienes por aquí o por el otro lado." Ni pronuncio palabra. Comienzo a andar en su dirección. Me sigue. Cuando llegamos a la zona por donde intuyo que vive, digo: "Ahora sí, nuestros caminos se separan. Encantado, X". Intenta ponerse en mi camino para (imagino) hablar conmigo, pero da la absoluta casualidad que en ese momento me llama mi hermana. "Puede que me quedase para escuchar lo que me tienes que decir, pero quiero continuar mi fiesta por hoy. Chao." (Cara de poker). "Tengo la regla y estoy super mala, en serio." (Era totalmente cierto, al menos, que estaba mala). "Sin problema. Se nos hace tarde. Chao."
Voy de camino a casa, me escribe que le diga cuando llegue a casa. Al ratazo, le digo: I'm home. Ella sigue despierta, teniendo clases a las 8:30. Me empieza a sacar el tema de lo que ha pasado, le digo -muy poco reactivo, nada molesto, para nada- que a veces pasa que conoces a alguien y no tiene por qué gustarte, y que bueno, éste había sido un caso así. Se queda shock. "Me dejas flipando diciéndome eso. Tú a mí si me has gustado." "Ya, X, pero cuando algo te gusta, muestras cierto interés. No soy demasiado de palabras. Descansa y mejórate de lo tuyo. Un beso!" (Intento de conversación por su parte, a lo que no respondo). Esta mañana, mensaje suyo de buenos días, respuesta por mi parte, y propuesta para ir a tomar algo esta tarde, a la hora que yo diga, e invita ella. Según ella, me he llevado una impresión mala de ella y quiere intentar que la cambie.
Para el que quiera leerse la historia con partes de conversación:
Conclusión: nunca permitáis a una tía nada que no le permitiríais a un tío.