Hace relativamente poco (tres meses aproximadamente) hice match con una chica que me ha dejado un poco tocado. Al principio hablábamos por tinder y tal pero yo pasaba de pedirle instagram o el teléfono para hablar por whatsapp, simplemente me la sudaba un poco todo. Al cabo de una semana y algo ella me pidió mi número.
La primera cita fue genial, quedamos para cenar por Barcelona centro, tomar algo y luego incluso propuso de salir de fiesta aun teniendo ella que trabajar por la mañana. Acabamos liándonos en la discoteca y luego fuimos a mi casa. Uno de los mejores polvos de mi vida, conectamos muchísimo.
A raíz de esa noche nos veíamos cada día. Ella salía de trabajar a las 18 y venía a recogerme a mi trabajo para estar juntos hasta la noche. Fueron un par de semanas muy intensas, no he follado tanto en mi vida, ni cuando tenía pareja, a parte de que creo que es una de las pocas chicas que he conectado tanto.
A todo esto había un problema, ella se iba a vivir a principios de agosto a Valencia, yo me estaba empezando a pillar por ella y parecía que ella también por mi. Crónica de una muerte anunciada.
La despedida fue muy mal, en principio íbamos a irnos de fin de semana a la montaña para despedirnos y hacer algo un poco distinto, pero decidimos hacer algo mas light por la pena máxima. Nos vimos un rato, lloramos un poco juntos y poco mas. En principio era una tontería, ya que Valencia está al lado y yo iba a bajar a verla un par de semanas después de su mudanza, a parte de que ella tiene su familia aquí y subirá regularmente.
Ahora que está en Valencia y con su nuevo trabajo parece que tiene mucha faena (esto es de verdad, tiene varios proyectos personales importantes para entregar en Septiembre), me ha pedido que no baje hasta principios del mes que viene. Pero tampoco hablamos como antes...
¿Ha sido lo que llaman un amor de verano?
